Durante todo el año, el deporte masculino, y en concreto el fútbol, ocupa la mitad de los noticiarios y periódicos. Al deporte femenino, sin embargo, se le dedican efímeros minutos de la prensa o televisión, solo si consiguen llegar a lo más alto.
Tanto Matilde como María con catorce y ocho años de experiencia respectivamente en el Albacete es el primer año que cobran por su trabajo deportivo. Ambas jugadoras compaginan sus trabajos y estudios con los entrenamientos y partidos, lo que admiten que es física y mentalmente muy duro aunque palabras textuales de María: “la satisfacción que me produce el fútbol y todo lo que conlleva por ahora puede con todo”.
De hecho, las dos futbolistas coinciden en que competir en Primera les supone un esfuerzo extra en comparación con otras jugadoras que se dedican y pueden vivir exclusivamente de ello. “En esta categoría los equipos son muy fuertes y prácticamente todas las jugadoras se dedican a entrenar y cuidar su cuerpo para la competición. Nosotras no tenemos esa suerte y el dinero no es suficiente, tenemos que trabajar y seguir formándonos. Yo, por ejemplo, no puedo trabajar en hospital porque me ocuparía los fines de semana que es cuando viajamos y jugamos, por lo tanto sólo puedo estar inscrita en la bolsa de trabajo de Atención Primaria (centros de salud, que me permiten tener las tardes y los fines de semana libres) para poder seguir jugando” afirma Matilde.
Desde vuestra posición de jugadoras profesionales, ¿pensáis que los medios de comunicación os dan el mismo tratamiento que a los equipos masculinos?
“En absoluto. Ocurre con todos los deportes excepto en fútbol masculino. En España vende más el peinado de Cristiano o Messi que cualquier triunfo o anécdota en otro deporte y los medios de comunicación basan su sección deportiva en ello. Particularmente, estos últimos años el fútbol femenino está cobrando más protagonismo. El organismo de La Liga nos ha “adoptado” y esto ha provocado que aparezcamos más en televisión y redes sociales” declara Matilde Martínez.
María Arranz coincide con su compañera de equipo: “Ni mucho menos recibimos el mismo trato, yo diría que ni la mitad, pero bueno todos/as los que formamos el futbol femenino llevamos mucho tiempo luchando y por suerte se van viendo los resultados, si es cierto que cada vez son más los que apuestan por este deporte y ese apoyo se ve reflejado. Creo que los medios de comunicación (sobre todo informativos televisivos) deben darle un poco más de vida para que sigamos creciendo”.
Celebración del primer gol en Primera División
Las jugadoras del Albacete afirman que aunque se va normalizando que las mujeres jueguen a fútbol y no sea algo reservado a los hombres muchas veces se han sentido discriminadas por el hecho de ser mujeres. “Hay personas que no entienden que el fútbol es un deporte y no algo sólo reservado a los chicos. Hoy en día cada vez son menos pero todavía nos dicen cosas como ¡lo que tienes que hacer es irte a fregar! o ¡si llevaseis los pantalones más cortos iría más gente a ver vuestros partidos!”. “A día de hoy sigue existiendo machismo en el fútbol, pero por suerte cada día va habiendo menos, es una barbaridad lo que ha evolucionado este deporte en los años que yo lo llevo practicando con chicas como tal y espero y deseo que esto siga creciendo más y más y llegue el día que este casi igualado aunque yo ya no lo pueda practicar pero sí que lo pueda ver”.
María y Matilde declaran sentirse muy arropadas por la afición del Albacete tanto en los partidos como en las redes sociales, lo que las impulsa a seguir luchando y jugando como solo ellas saben.
