La tormenta perfecta
El pabellón no se llena pero aparecen personas al goteo durante el jueves y el viernes. Algunos son familiares, otros son curiosos, todos ellos aficionados que podrían estar haciendo otra cosa, como ver la televisión en su casa, sobre todo si tenemos en cuenta el tiempo tan desapacible que sufrimos. Pero es más interesante hacer peña, hacer familia, o quizás sólo curiosear, una vicio manchego y beneficioso en la mayoría de las ocasiones.