Hoy hemos conocido otra nueva cacicada de con Arturo, concejal de Cultura, que desde que llegó al Ayuntamiento de Chinchilla se ha cargado, medida a medida, el trabajado y los logros que durante tantos años costó conseguir, y que contribuyó a que Chinchilla estuviese a la vanguardia de la cultura nacional.
La última fue el pasado 20 de febrero cuando por decisión propia de Arturo Tendero, Chinchilla abandonó el selecto club de los grandes teatros españoles de la Red Nacional de Teatros de titularidad pública. Hay que recordar que el camino para formar parte de esta asociación no fue fácil ya que Chinchilla fue el teatro más pequeño de todos los componentes, miembros son: el Kursaal, de San Sebastián; el Teatro Abadía, de Madrid; El Gran Teatro, de Córdoba; el Teatro Cervantes, de Málaga; Teatro Lope de Vega, de Sevilla; Teatro Principal, de Alicante; Auditorio Alfredo Kraus, de Las Palmas y otros muchos grandes teatros de capitales hasta completar los 131.
Para ser miembro, Chinchilla tuvo que superar un complicado examen en el que se analizaron al detalle todos los requisitos escénicos y técnicos, tuvo que ser avalado por importantes teatros españoles y defender su candidatura en el plenario de la Red Nacional que tuvo lugar en Sevilla en 2004. Todo un trabajo tirado por la borda y que será muy difícil de recuperar.
Gracias a ser miembros de la Red, se consiguió por precios módicos e incluso con rebajas de hasta el 75 % del caché que obras de teatro que todavía no se habían estrenado en Madrid (con primeras figuras), estuvieran en nuestro Teatro: Emilio Gutiérrez Caba, Carmen Machi, Joan Manuel Serrat, Pastora Soler, Francisco, El Sueño de Morfeo, Nacho Fresneda, María Pujalte, Carlos Hipólito, Luisa Martin, Terele Pavez, Paco Tous etc.
Tras el abandono voluntario y caprichoso del Sr. Tendero, hemos conseguido pasar -y hablo en términos futbolísticos- de la primera división cultural a una liguilla de barrio. En la programación de nuestro teatro se puede comprobar que solamente existen monólogos y magos.
Sé que en su defensa hablará de los costes de ser miembro. Pero éstos no superaban los 1.500 euros anuales y, además, hay que tener en cuenta que al contratar solamente una obra de las recomendadas por la Red, el descuento ya lo compensa con creces.
La caída de la programación hace que se resientan notablemente los establecimientos hosteleros, que en otras épocas disfrutaban también de la clientela del público de Albacete capital que se desplazaba a Chinchilla al teatro y cenaban en los establecimientos de nuestra localidad, ese turismo gastronómico también ha desaparecido.
Otro nuevo golpe a la cultura de Chinchilla, y me da la impresión que no será el último. El señor Tendero, pretende hundirnos en el olvido y en la incultura, (todo lo que no es suyo tiene que desaparecer). La cultura de Chinchilla está muerta y con decisiones como esta, la de controlar los medios de comunicación, autonombrarse director en la emisora municipal, cerrar la página web de Chinchilla que tanto hace por el turismo y otras tantas medidas dictatoriales que estamos viendo todos los días piden que se cambie cuanto antes el nombre de la concejalía de Cultura por la de la ‘INCULTURA’.