Una asociación de empresarios del transporte ha denunciado a otra empresa, esta de Internet, por competencia desleal puesto que se dedica a juntar o reunir personas en coches porque les roba clientes.

No os asustéis, no es en Albacete, donde esa misma web de reunión de personas, Cuchicuchi Coche, permite a cientos de personas llegar donde no lo hacen los autobuses o trenes, burros o carretas.

Toñín es una persona que está en paro, diseñador gráfico de 39 años. Lleva un año y medio desempleado y le han ofrecido un trabajo para empezar el lunes en Caudete, un pueblo con un parque científico estupendo y muchas empresas que miran a Levante y necesitan diseñadores gráficos, comerciales, o informáticos. ¡Una buena oportunidad!

Por esos azares de la vida no tiene coche, así que fue a la web de Renfe; y luego a la de la estación de autobuses de Albacete.

Complicado, las combinaciones sólo son aceptables si vas a Levante y/o Madrid.

Le hablaron de Cuchicuchi Coche como alternativa. La única alternativa a una persona que ha encontrado trabajo y no tiene coche, porque si tienes automóvil, ¡qué importancia puede tener el transporte público!

Si accedes a Cuchicuchi Coche encontrarás un montón de personas sospechosas de ser «amigos de lo público», como Javi y Loli, treintañeros, jóvenes, preparados, con plazas libres en sus coches. Dan la opción a otras personas a compartir su coche por dos o tres euros a Caudete. Toñín sonríe, al menos podrá ir la primera semana… a trabajar… luego ya veremos.

No es un invento nuevo, en los pueblos se viene haciendo de toda la vida:

-¿Quién va mañana a Albacete? -Dice alguien en el bar de Molinicos.

-El hijo del Luquitas -contesta otro.

Aquello se llamaba redes sociales.

Imagina que te sale trabajo mañana. ¿Sabes a qué pueblos podrías ir por tren? Almansa, La Roda, Villarrobledo, ¿Minaya? ¿Caudete? ¿Hellín? ¿Y si te sale en Letur, o Elche de la Sierra, o en Nerpio? ¿Llega el autobús, cuánto tarda, hay combinación en el mismo día?

Tus amigos y tus padres te dirán que compres un coche. ¡Claro, Toñín, el joven diseñador lo compraría! Y una casa, y una parcela con piscina y un piso en San Juan. Pasaría a llamarse Don Antonio.

Pero, ¿quién se mete en gastos tal y como están las cosas?

Cuchicuchi Coche viene a llenar un hueco que el transporte público y/o privado no puede llenar…en Albacete. ¿O quizás sólo es el viejo sistema de autostop online?

Toñín se decide por Javi, conduce un coche más potente y el precio de su viaje es algo inferior. Se citan en Torres Quevedo, salen a la autovía y antes de llegar a Chinchilla ya se han puesto al día, amigos comunes, experiencias compartidas. ¡Qué gran pueblo Albacete!

Javi le cuenta a Toñín que conduce gracias al coche de su padre, prestado, por supuesto; pero ya está mirando catálogos de concesionarios porque le van a hacer fijo en junio. El sueldo no subirá pero el banco se fía más de un fijo que no de un temporal cualquiera.

De momento compartirán coche varios días. Con la suerte que tienen, compartirán confidencias. Con peor suerte, se harán amigos; gracias a la crisis económica, la dispersión geográfica y Cuchicuchi Coche.