La cúpula popular, en caída libre

Jarro de agua fría para el PP en las encuestas

Marto Egido Piqueras

La encuesta publicada este sábado en el diario El País, constata lo que muchos expertos en el análisis político venían vaticinando desde hace unos meses; en la misma línea que el gurú electoral de los populares, Pedro Arriola había pronosticado en el mes de septiembre: el PP se está derrumbando electoralmente. El tema de la retirada de la Ley del aborto, solamente ha sido la punta del iceberg de lo que se está fraguando en la trastienda Popular.

Los imputados en los distintos procesos judiciales: caso Gürtel, Bárcenas, ex ministros ya en la cárcel como Matas, sobresueldos, sobres, un candidato a comisario europeo que puede pasar a la historia como el único candidato español para un altísimo cargo que pueda ser apartado antes de su nombramiento y lo último (que puede ser de traca) las ya famosas tarjetas de crédito en Caja Madrid. Todo esto está haciendo que el edificio Popular se esté desmoronando a pasos agigantados.

Los resultados de esta última encuesta no son malos para el PP, ¡son horribles! No solamente por el bajón espectacular en intención de voto, pasando del 31.6 en 2011 al 15.9 en 2014, sino porque una fuerza extraparlamentaria como Podemos, se le pone a 1.6 puntos de diferencia y esto ya toma tintes dramáticos para el Partido Popular.

¿Alguien se podría imaginar a un año de las elecciones generales de noviembre de 2015, que el partido de Pablo Iglesias adelantase al PP y pasasen de ser un partido de gobierno y de tercera fuerza a primera? Esto sería alucinante y no es una hipótesis de ciencia ficción sino que podría ser realidad dentro de un año.

Estoy seguro de que los dirigentes populares saldrán en tromba estos primeros días de semana desacreditando la encuesta y no dándole valor pero lo cierto y fijo es que es un durísimo toque de atención y que se han puesto muy nerviosos.

Por su parte, el PSOE remonta unas décimas y parece que el efecto ‘Pedro Sánchez’ se confirma pero esto es un dato casi irrelevante ante el tortazo espectacular de los populares, sobre todo cuando en siete meses se juegan el gobierno de muchísimos ayuntamientos y de la mayoría de las comunidades autónomas de nuestro país, con lo que conlleva todo eso.

Me cuentan que la noticia de la encuesta la conoció el PP directamente de El País, durante la Interparlamentaria del PP que tuvo lugar este fin de semana en Guadalajara. Al parecer se les aguó la fiesta y se quedaron de piedra. Se dice que Cospedal fue una de las más visiblemente afectadas. Sobre todo pensaría que si pierde Castilla-La Mancha por goleada, su futuro político estará acabado y más con las ganas que le tienen en Génova, donde cada día tiene más enemigos, muchos de ellos en círculos reservados reconocen que estarían más que encantados de que se la pegase en toda regla, en nuestra región.

El futuro, a mi juicio, está claro y Rajoy ya valora la propuesta de Arriola de adelantar urgentemente las elecciones generales. Pero tienen un problema: las autonómicas y municipales de mayo que le impiden un adelanto para la primavera y lo de unirlas es imposible ya que no se pueden juntar municipales, autonómicas y generales en una misma jornada electoral porque en algunos lugares, caso de Castilla-La Mancha, tendríamos hasta cuatro urnas distintas, ¡una auténtica locura!

Lo tiene difícil Rajoy porque entre estos datos de la encuesta del sábado, el problemón catalán y los juicios donde están implicados muchos de su dirigentes el panorama no es negro, es negrísimo y con soluciones complicadas.

Mi opinión personal, está clara, estamos abocados a un adelanto electoral de las generales antes de las municipales, que tendría que convocarlas como muy tarde en noviembre o antes del verano, junio o principios de julio aunque estarían muy pegadas a las municipales. Por donde tire Rajoy le pilla el toro, si es que el toro no lo ha pillado ya, veremos qué pasa en estos próximos meses de tanta zozobra electoral.