El pasado 13 de noviembre Caudete se convirtió en “municipio libre de circos con animales salvajes”. La moción presentada por la Plataforma “Caudete Ecológica” fue aprobada por unanimidad. Esta prohibición impedirá los espectáculos circenses en los que intervengan animales salvajes, afectando también a los circos que transporten estos animales en sus instalaciones.
Los animales de circo suelen vivir en jaulas donde apenas se pueden mover, algunos de ellos permanecen atados la mayor parte del día, lo que les impide desarrollar sus comportamientos naturales. El confinamiento al que son sometidos lleva a los animales a padecer daños mentales, mostrando comportamientos obsesivos, repetitivos y anormales.
Según el cofundador de “ZooCheck” y zoólogo Bill Travers, el encierro lleva a los animales a sufrir una patología llamada “zoocosis”, término acuñado en 1992 por él mismo. Algunos de los síntomas que puede presentar la zoocosis son: dar vueltas en círculo, deambular constantemente siguiendo el mismo patrón repetitivo (felinos y cánidos suelen presentar este comportamiento), balanceo constante (observado en elefantes) e incluso animales que llegan a la automutilación.
Pablo Ferrándiz Marco miembro de la iniciativa ciudadana “Caudete Ecológica”, cuenta que esta plataforma nace en Facebook, uniendo a personas del pueblo con inquietudes ecologistas, pero que no fue hasta hace un año, cuando se instaló en Caudete un circo condenado en Italia por maltrato animal, que empezó a forjarse. Actualmente están trabajando para convertirse en Asociación.
Cuando se le pregunta el por qué de un circo sin animales Pablo afirma que “los espectáculos con animales están fuera de lugar en el siglo XXI. Los circos no reúnen las condiciones mínimas para una vida digna. Creemos firmemente que hoy en día hay otros espacios para poder ver animales. Y además queremos educar en el respeto hacia ellos, cosas por las cuales ha sido declarado este municipio Ciudad sin circos con animales”
Entre los caudetanos la acogida de esta medida pionera en Castilla-La Mancha ha sido buena. Ferrándiz Marco, asegura que “Los circos ya no son lo que eran y la gente entiende perfectamente las razones por las cuales se ha propuesto esta medida” además, añade: “esta medida no viene a ser más que otra iniciativa para seguir haciendo hincapié en algo que se lleva trabajando desde hace tiempo a nivel tanto municipal como empresarial y desde las distintas asociaciones. Ser el primer municipio en toda Castilla-La Mancha es un orgullo, y habla muy claro y muy alto sobre cómo somos y queremos que nos vean desde toda la provincia y desde toda la comunidad”.
También es significativo, dice Pablo “que después de más de tres años se aprobó por primera vez en el último pleno, esta media por unanimidad, vamos que se pusieron todos los partidos de acuerdo por primera vez en toda la legislatura. Creemos que dice mucho sobre la aceptación de esta medida, que hay que recordar que es ciudadana, no promovida por ningún partido político”.
Algunos de los argumentos de los defensores de la presencia de animales en los circos es el supuesto “valor educativo” que pretenden divulgar exhibiendo especies salvajes. Pero lo cierto es que mostrar animales fuera de su hábitat, en entornos artificiales y realizando comportamientos antinaturales no tiene valor didáctico alguno.
Pablo Ferrándiz concluye “educar en el rechazo al maltrato animal hace mejor a las personas y empatizar con los animales y con el entorno nos lleva a crear una sociedad más justa. Ya lo dijo Mahatma Ghandi: “Un país, una civilización se puede juzgar por la forma en que trata a sus animales”.