Madre mía como está el patio, cómo están las cosas en los pueblos de la provincia, empezando por este gran pueblo que es Albacete.
Los empadronamientos se cerraron a 31 de diciembre y ahora ya no se puede hacer nada, el censo es el que es, no puedes repescar familiares, amigos o estómagos agradecidos. Y digo esto porque tu teléfono podría sonar y ser del PP, del PSOE; de UPyD, de Ciudadanos o de Equo, «¿que si quieres ir en las listas?».
Tenemos muchos candidatos aunque no todos, ni mucho menos, para eso faltan unos pocos días.
Ser candidato tiene su puntillo orgásmico, sales en carteles, la gente te mira, te aman, te odian. Lo mismo hasta te votan. Pero el rollo erótico un mes entero, vamos, ¡ni en Benidorm en verano!
Y para un buen candidato, una buena lista de concejalables.
En Albacete se ha conocido que el exfutbolista del Albacete Balompié y hostelero, Catali, se presenta en la candidatura del Partido Socialista Obrero Español, algo que ha desconcertado a muchos y sorprendido a otros pocos más. ¿Dónde colocamos a Catali, en la casta o en la regeneración? Nos hemos quedado sin calificativos. Pero líbrenos de criticar a un jugador que tantas buenas horas deportivas regaló a esta ciudad.
Formar parte de una lista se ha convertido en un aliciente para muchos. He de decir, aunque mis compañeros lo nieguen, que algunos miembros de ‘Albacete Cuenta’ también hemos sido tentados con las mieles de las candidaturas, listaduras, y partidos provinciales. Porque aquí hasta el más tonto de los redactores tiene su curriculum, sus amistades y, amigo mío, todos vienen de un pueblo.
A mí mismo, que de bueno soy tonto, me tentaron. Pero al primer golpetazo cuando quise dar mi punto de vista de manera abierta y sincera, me volví al baloncesto. Es mucho más agradecido por eso de que ganes o pierdas, siempre metes… canastas.
A Marto le pasa tres cuartas de lo mismo pero con mucho más curriculum que el coletas de Venta. Conoce a media provincia, lo conocen por todas partes, y sabe tantos secretos de un lado y de otro del Júcar que tenerlo a favor es casi mejor que tenerlo enfrentado.
Ana, la jefa, se está pateando la provincia como si fuera Barreda en sus mejores tiempos, la conocen las asociaciones de mujeres, conoce a agricultores de los pueblos más perdidos, y todos sabemos el poder de los pueblos y el poder de la tierra. Además, es jefa de un medio de comunicación, ¡qué morbazo! Una Dimas Cuevas, ¡vaya debate!
A Cristina la dejo tranquila porque conoce tantas interioridades de tantas personas y tiene tantas amistades, que bien podría conocer las mías y denunciarlas si me voy de la lengua.
Y María del Señor está exiliada, así que nadie puede ofrecerle nada mejor que estar en el extranjero creciendo.
Sí, a los chicos de ‘Albacete Cuenta’ les interesa la política y, como muchos lo saben, tientan. Sí, a los chicos de ‘Albacete Cuenta’ les interesa pelear por sus pueblos y provincia, pero no a cualquier precio.
Sí, sus teléfonos suenan.
Es tan divertido que, si no lo cuento, reviento.