Este año, la Campaña quiere incidir en la dignidad de toda persona por el simple hecho de serlo. Para ello, lanzan una propuesta para construir un modelo de sociedad diferente, que ponga a las personas y su dignidad en el centro y haga realidad lo que hoy parece imposible: que toda persona viva con dignidad en un hogar propio, en paz y permanente.
Un elemento fundamental para defender la dignidad de las personas sin hogar, tal y como recuerdan desde Cáritas es reivindicar su visibilidad, “ya que si no te veo, si no te reconozco, no puedo reconocerme en ti, no puedo poner en valor la dignidad que nos une e iguala como seres humanos”. El reto que supone construir una sociedad del bien común, que realmente ponga a las personas en el centro, exige de todos que seamos capaces de vivir la dignidad como un proceso de ida y vuelta, que reconozca que “tu dignidad es la mía, y que yo también me dignifico como persona a través de ti”.
Es por ello por lo que insisten en:
- Impulsar la visibilidad y el reconocimiento de las personas en situación de sin hogar
- Activar el compromiso del conjunto de las Administraciones para desarrollar políticas públicas que pongan a las personas en el centro (en especial a las persona sin hogar), y que apuesten por la protección y garantía de acceso a derechos humanos fundamentales (como vivienda y salud, entre otros).
- Generar mensajes positivos que luchen contra la discriminación y el estigma que sufren las personas en situación de sin hogar y que es una tarea esencial de los medios de comunicación.
Desde Cáritas insisten en que no quieren una sociedad de personas sin derechos, de expulsiones, de descartes o de exclusión radical.