¿Quién puso en riesgo la salud pública?

Ya no sobran hospitales

Albacete Cuenta

¿Se acuerdan del derroche en hospitales?  Sí, por ejemplo, los nuevos hospitales de Villarrobledo, Almansa o Tomelloso. El PP desacreditó a los gobernantes de entonces y cuando llegó al poder, por primera vez en Castilla-La Mancha, paró las obras, ¡hasta del Hospital de Toledo!

Bueno, pues ya no sobra ninguno.

¿Se acuerdan de la Marea Blanca que vino después en toda España? ¿Recuerdan su grito a la sociedad para que reaccionásemos y defendiéramos la Sanidad Pública?

Claro que sí. Todos estábamos de su lado.

La derecha más oportunista -salvo alguna sorprendente excepción- dice que el Gobierno de España llegó tarde para atender la crisis del Coronavirus. Si hubieran actuado antes, también les habrían criticado igual. De hecho, Reino Unido cerró este viernes los bares y no ha sido hasta ahora, cuando ha pedido confinamiento. Son precisamente, ahora, los culpables de que los hospitales estén en cuadro, los que más critican.

En Albacete Cuenta no creemos que se haya llegado semanas tarde, con respecto al resto de países. Creemos que Pedro Sánchez llegó muy tarde a ser presidente del Gobierno de España, ¿se imaginan que esta crisis nos llega a pillar con el PP en el poder? Afortunadamente, no está la derecha y el PSOE al que muchos creían a punto de la extinción, consiguió remontar frente a una derecha fragmentada y con el principal partido imputado por corrupción incapaz de gestionar nuestros más preciado bien, el sistema sanitario del país.

Llegamos años tarde, porque nuestros hospitales deberían estar ya dotados, de personal y de material y no desmantelados. Desde 2011 y el inicio de las políticas austericidas aplicadas a los pequeños y a lo público, estaba costando mucho la reconstrucción.

La pandemia, no la imaginábamos. La deshumanización, se veía venir. El descrédito a lo público, las campañas de compañías privadas, el cierre de centros de salud en los pueblos, los recortes a nuestro sistema de bienestar… habían hecho mella y volver a abrir lo que se había cerrado y cambiar la mentalidad estaba costando.

¿Saben cuál es la mayor empresa en la mayor parte de ciudades? Seguro que muchos de ustedes no lo dirían, pero algunos empresarios cazaprimas y especuladores responderían a la primera que el Hospital de cada capital. Es cuanto menos alarmante que muchos vean en las instalaciones de la Salud Pública una forma de hacer negocio.

Todos estamos de acuerdo que queda mucho por hacer, pero sobre todo hay que tener en cuenta que al Gobierno socialista le ha pillado la pandemia en plena tarea de reconstrucción del Estado de Bienestar.

Cuidar de lo común no puede estar en manos de cualquiera. Gestionar la crisis sanitaria y la, consecuente, crisis económica es tarea del pueblo y de gobernantes de lo social.

Desde este humilde medio, consideramos que, dentro de las dificultades, la política de comunicación del Presidente y los profesionales responsables del abastecimiento de material sanitario de primera necesidad, están desmontando muchos bulos. La imagen es de que están trabajando sin descanso y con criterio y, desde el principio, se ha mostrado orgullosos de los servidores públicos y han mantenido la moral de victoria.

Con el mismo lenguaje belicista en el que estamos inmersos, cabe recordar que la primera víctima de una guerra es la verdad. En este tiempo, también hemos aprendido que en Estado de Alerta, la información es considerada de ‘primera necesidad’ y los quioscos pueden permanecer abiertos. Más allá del ruido de vídeos, memes y fake news, podemos encontrar Periodismo.

 

 

Estado de Bienestar, marea blanca, psoe, Salud Pública