Anunciar un candidato a alcalde de Albacete en jueves es una cosa normal y corriente porque el jueves es un día cualquiera, el que está en medio de la semana.
Anunciarlo el «día de la mona», tiene su guasa.
La no sorpresa de la semana la dio por la mañana la alcaldesa de Albacete, al anunciar que se iría en Mayo y dejaría su puesto vacante para que otro se hiciera cargo. Pero en mayo, no se irá antes por varias razones: Bayod es testaruda, asumió un cargo y lo concluye, así de claro. Además de esto, si dejase vacante el puesto en el mes de febrero, hasta el mes de mayo tendría el PP un alcalde en funciones (ya sabéis la cola que trae eso) que poco favor político y de imagen le harían al partido, según entienden algunas personas cercanas al Partido Popular.
Carmen Bayod será alcaldesa hasta el mes de mayo, cumplirá con sus compromisos a pesar de que muchos pensaran que, debido a su delicada salud, debería haber optado por dejar el puesto a otra persona y descansar.
Esto fue «el día de la mona» por la mañana.
Por la tarde, cuando todo Albacete estaba atiborrado, hasta arriba de azúcar, huevo duro y chocolate, el PP mandó un breve comunicado de prensa que sorprendió a muchos quienes, como yo, estábamos convencidos de que el futuro alcalde de Albacete sería Marcial Marín.
¡No!
Muchos sorprendidos que nos dejamos convencer en despachos y pueblos donde la tendencia Marín era mayoritaria y mejor vista. Es más que posible que alentada y promocionada por el mismo consejero de Educación.
¡Nada, no!
Ahora hay sorprendidos y muchos que no lo están tanto. Razonable a toro pasado.
El nuevo candidato vía comunicado de prensa, que hoy se hinchará a hacer radios, y medios digitales porque en jueves lardero estábamos donde estábamos, es Javier Cuenca.
Javier Cuenca es el actual delegado de la Junta en Albacete, a quien tendremos oportunidad de ver de aquí a mayo mucho más de lo que lo hemos visto hasta el momento. Además, con la casualidad y oportunidad propia del puesto, (que culpa suya no es) apenas tendrá que hacer sobreesfuerzo, aunque es posible que alguien le acuse de hacer campaña desde un cargo público.
Pero no adelantemos.
Ahora le toca entrar en batalla, aunque ya conoce el jaleo porque en las últimas elecciones municipales iba cuarto en la candidatura del Partido Popular.
De Cuenca hablan bien, afirman que es buena persona, buen trabajador y un funcionario aplicado. Pero a nadie se le escapa que era la mejor opción de la presidenta de Castilla-La Mancha, con lo que ello implica.
En las redes sociales hubo bromas y guasas pero todo muy ajustadito. Varios partidos políticos, como PSOE y UPyD remitieron comunicados de prensa al calor de la noticia. Neutros, correctos, salvo algún dirigente de Izquierda Unida que se salió del guión despidiendo con sarcasmo a la Alcaldesa.
Porque todos tenemos filias y fobias.
Lo que parece claro es que la campaña se llenará de testosterona y gónadas, algo muy bonito siempre, agradable a la vista.
La carrera ha empezado en pleno carnaval, las comparsas están listas, algunos disfraces son mejores que otros y algunas máscaras dejan entrever la identidad de quien hay detrás.
Ahora sí.