Un representante del Partido Popular en Ciudad Real dijo hace unos días que el Partido Socialista Obrero Español suspendería este curso escolar. Este tipo de afirmaciones le sonará mucho a los estudiantes, todavía recuerdo en la Universidad de Castilla-La Mancha a un rector muy rectorado asustando a los recién llegados que llenaban las clases con una afirmación parecida, y cito de memoria: «De los que estáis aquí, no aprobaréis ni el 20%».
Aquel rector era muy político sí. Vaya, ya se me ha escapado.
Por suerte en aquella época los chicos y chicas queríamos ser licenciados y a pesar de que suspendíamos (o nos suspendían) una y otra vez, nos matriculábamos y la Universidad se mantenía engrasada.
Pero el inicio de curso al que me refiero no tiene nada que ver con el Ministro Wert y el abandono de aulas, ni con la nueva ley de Educación. En septiembre se inicia el curso escolar y es una metáfora tan bonita que los políticos (algunos con asesores bien remunerados, otros con asesores con sueldos ridículos) no pueden resistirse a los juegos de palabras.
- Este curso escolar no podemos suspender.
- Van a suspender seguro.
- Un inicio de curso caliente.
- Este curso tiene muchas asignaturas pendientes.
A cualquier padre de clase media baja, la sola mención del inicio de curso le suponen un hachazo a los ahorros.
Pero la mención del inicio del curso político ha puesto nerviosos a más de tres y más de cuatro. Digo de Madrid, digo de Toledo y digo de Albacete.
El inicio de los tres años anteriores no suponía nada más que decir lo malo que era el PP; o decir lo mal que lo hizo el PSOE. Poco más recordamos.
Nos llegan rumores, se publican encuestas poco fiables a nivel estatal, donde el partido de falsos novatos, Podemos, se coloca en tercera posición. Lo cual no supone nada porque en las elecciones de mayo no se elige a un candidato estatal sino a alcaldes y presidentes regionales.
Y es aquí donde empieza el curso de verdad porque nada de lo que haya hecho el Partido Popular hasta el momento sirve. A partir de ahora tendrán que convocar alguna que otra beca, dar alguna que otra ayuda y subvención, convocar alguna que otra oposición.
No sirve inaugurar tramos de carreteras comarcales, a la gente solo le sirve el dinero, el trabajo, la tranquilidad. ¿Se puede conseguir eso en nueve meses? En nueve meses nace una persona, así que sí.
No os dejéis engañar, dinero hay (aunque digan lo contrario), solo toca repartirlo y que se vea.
Nos llegan rumores, las malas lenguas son malignas, de que el PP ha está pidiendo encuestas favorables, que no dejan de buscar donde sembrar semillas que den frutos en nueve meses.
Dicen que el PP está empezando a comprar a buen precio, siempre y cuando se obtengan resultados satisfactorios. Se rumorea que es el momento de pedir, no la luna y las estrellas, pero sí esas cosillas que hace dos años no se podían ni pensar.
Nueve meses, apenas un embarazo. Nueve meses para semillas de crecimiento rápido.
Porque nadie quiere suspender, no sirve un suficiente raspado. ¿Y si se llena Albacete de concejales rebotados de partidos independientes, de Izquierda Unida, de UpyD o de Podemos?
Menudo embarazo.
Inicio de curso y quedarse embarazado al primer casquete de final de verano no es la mejor manera de empezarlo.